Rebuscar a ver

jueves, 9 de octubre de 2014

Sonrisas Etéreas

A pesar de que en algún momento, hace mucho tiempo, sonreír era de mala educación, en el ahora sonreír crea una proximidad de esas que convence a cualquiera.

Estando ebrio o estando sobrio, cuando la sonrisa llena de calor al interlocutor se abren puertas un poco artificiales, a pesar de ello, y que se convierten en grietas entre las cuales fluyen los pensamientos o palabras que el otro envíe.

Una conversación desdibuja los limites sólidos del desconocimiento cuando aparecen esas grotescas muecas maravillosas con que nos seducimos unos a otros.

De la nada vienen y para allá van esos idilios.

Sonreír es una droga social, no hay nada malo en consumirla pero algunas veces con ello se busca huir del momento, la realidad, inventando sonrisas y alegrías nos dopamos y evitamos enfrentar nuestros presentes y los silencios con que nuestras mentes se pintan día a día.

La felicidad puede ser un desiderátum. Tal vez todos andamos infelices, evitando el sentido negativo de la palabra, la necesidad de mostrar un buen semblante siendo este real o virtual, poco a poco va amoldando las cabezas, la cultura, la vida.

Como con el Licor, El tabaco, el Sexo, La Internet, entre otros, El Bienestar (supuesto o No) se metió en la aceptación social, pero dentro de las voces jóvenes se escucha como con el Licor, El tabaco, el Sexo, La Internet, entre otros; una protesta, un reniego.

Se reniega evitando esa idea de estar bien, todo el que ha sido joven debe saber qué se siente pensar en un No-Futuro.

No es una Critica, no es una preocupacion o advertencia, es una expresión, no tiene un futuro, es  uno de esos ahoras que buscan no desvanecerse, la infelicidad (como punto casi final) es algo que difiere de la alegría puesto que no es efimera, su huella no se desvanece del recuerdo y los surcos de sus lagrimas o el peso en el pecho siempre regresa, ademas la infelicidad puede acomodar al mundo, nos hace innovar... Tal Vez.

La critica, acto creativo, nace de lo insatisfecho, busca llenar los huecos que se ven sin remendar o cuidar.